Tauro

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Tauro  es un signo  Fijo, su elemento es la Tierra y el planeta regente es Venus. Las palabras claves en esta fase del zodíaco son posesividad y fertilización. La posibilidad de poseer lo que uno necesita con vista a autorrealizarse en el futuro está simbolizada por Tauro.  Tiene contacto con lo concreto, con su cuerpo, con la naturaleza. Lo concreto se relaciona con la necesidad. La atención está puesta en el proceso de materializar, de llevar a lo práctico, que las cosas adquieran peso, estabilidad, perdurabilidad. Al responder a sus propias necesidades sensuales, Tauro aprende mucho sobre los distintos caminos del mundo natural. El tacto, el gusto, el oído, el olfato y la vista, todos ayudan a Tauro a apreciar la vida en su nivel más básico y físico. Al no dejarse desconcentrar por los conceptos abstractos teóricos, que parecen lejanamente extraídos de la experiencia del mundo real, Tauro quiere aplacar sus apetitos terrenales relacionados con asuntos concretos del aquí y ahora.  Es el número dos, el movimiento activo, iniciador (1 Aries) se complementa y genera en el 2 . Comer, dormir y la sexualidad son funciones naturales que deben estar presentes en Tauro; también el dinero. Emocionalmente es muy sensible, pero no demostrativo.  Trata de evitar los terremotos emocionales. Herir a Tauro es como herir un toro, hay que pegarle mucho. Una vez herido grabó el dolor, esto hace que sea un signo que no perdona fácilmente. Es lento, pesado, perezoso, sólido. No se mueve por cosas innecesarias. Tiene una fuerte predisposición a conservar y a defender todo lo heredado. Fidelidad a su pasado. Su acción se dirige a la realidad material, y halla en esta el campo principal de sus actividades.  Posee mucha fuerza de persistencia  La misión de Tauro no es la de tender a lo nuevo, sino la de conservar lo conquistado y disponerlo para el uso en el momento oportuno. En el doble sentido de la palabra cuidar como cultivar y proteger se revela la predisposición psíquica fundamental de Tauro, axial como la tolerancia y la paciencia. Tauro rige el cuello la garganta y la glándula tiroides. Esta es esencialmente la región de donde debe emanar la actividad creadora del ser humano. Los órganos de la garganta no solo vigilan todo lo que tenga que pasar por ellos al entrar en el cuerpo , sino que también vigilan todo lo que por ellos sale del cuerpo. De allí la misión de Tauro de convertirse en guardián de los conocimientos y sabidurías de la humanidad. Es el signo más estable del zodiaco ya que es de cualidad fija que se une al elemento tierra. Es una energía claramente lenta y firme, que no cambia con facilidad, porque los procesos son lentos. Las necesidades del toro son simples, poco sofisticadas; este no pretende una vida de encantos y ostentación para estar en paz consigo mismo; esta satisfecho cuando todo en el nivel material funciona bien, cuando siente que es recompensado por vivir en sincronización con los ritmos del mundo natural.  Un rasgo típico será la posesividad, porque su naturaleza es acumular. Retiene porque necesita. esta muy conectado con la necesidad vital. Es más realizador que Aries, porque no para hasta que las cosas se concretan. Tiene que ser algo importante para que Tauro entre en actividad. Cuando lo hizo, difícilmente cambiará su decisión. Por eso puede ser testarudo. Cuando Tauro decidió puso en movimiento una estructura muy compleja, muy masiva, por eso no cambiara la dirección. Por eso le cuesta mucho cambiar, cambiar sobre la marcha. Posee un fuerte y básico contacto con la vida, con lo natural.